¿Te has preguntado alguna vez lo importante que es disfrutar del sexo? Muchas personas están inmersas en la rutina y viven estresadas; pensando que mientras más rápida sea la actividad sexual, mejor será para ellos, pero no es así. Es por eso que el Slow Sex viene para mejorar las cosas y el punto de vista de muchas personas.
Qué es el 'slow sex'
El Slow Sex, consiste en una práctica en donde el objetivo principal es disfrutar del sexo pero de forma consciente; lo que se traduce en una mayor satisfacción, implicando los cinco sentidos para tener una experiencia sumamente placentera.
Aumenta la excitación y el placer
Gracias a la práctica del Slow Sex se consigue mayor disfrute, ya que nos permite llegar al clímax progresivamente. De este modo, el deseo es más intenso porque la energía se va acumulando en el cuerpo hasta explotar de placer cuando llegue el momento.
Beneficios del Slow Sex
Uno de los grandes beneficios de practicarlo, es que se redescubre no sólo el propio cuerpo, sino también el de la pareja; así como las sensaciones que mayor placer nos causan. También, se desarrolla la creatividad, la conexión y una mejor comunicación sobre los gustos de la pareja.
Cómo se practica el Slow Sex
Practicar adecuadamente el Slow Sex requiere que tengas presente ciertos aspectos de los que te hablaremos a continuación. Recordemos que el objetivo principal es disfrutar el mayor tiempo posible, sin estrés ni preocupaciones que agobien nuestros pensamientos.
Conoced mejor vuestros cuerpos
Para practicar el Slow Sex es importante darse el tiempo para explorar el propio cuerpo y el de la pareja; saber qué zonas resultan ser más erógenas para estimularlas con mayor detenimiento.
Prepara antes el ambiente
El ambiente en donde se practique también es importante, por eso conviene colocar música agradable; así como elementos decorativos para acompañar la velada.
Una técnica sin prisa
Cuando vayas a probar el Slow Sex con tu pareja, olvídate del reloj. Recuerda que aquí lo que importa es la calidad del tiempo.
Imprescindible que haya una comunicación fluida
Una buena comunicación es imprescindible en la práctica del Slow Sex, ya que esta es la mejor forma de expresar los gustos particulares de cada quien.
Los sentidos forman parte del juego
Este es un aspecto que puede resultar ser muy interesante, así que se pueden emplear objetos que nos sirvan para aumentar la excitación.
El masaje erótico no puede faltar
Dado que en el Slow Sex es de gran relevancia el tiempo que se dedica al placer sexual, un buen masaje erótico no puede dejarse de lado. Este tiene que hacerse con cautela para disfrutar aún más del mismo y puede ir acompañado de cremas especializadas para cumplir con esto.
Practica el sexo oral
En toda relación íntima el sexo oral es un elemento extra muy importante. Por este motivo, debe ejecutarse adecuadamente para garantizar la máxima satisfacción de tu compañero o compañera.
Juguetes eróticos y da un toque de placer e imaginación
Existen juguetes eróticos que ayudan mucho en las sesiones de Slow Sex. Por lo que se recomienda emplearlos en otras zonas erógenas del cuerpo y no solo en los genitales para aumentar la excitación sexual.
Penetración... pero lenta
En el Slow Sex puede emplearse la penetración, siempre y cuando esta sea más intensa que veloz. La idea es culminar la experiencia juntos de la forma más grata posible, sin prisas.
¡Y vuelta a empezar!
Puedes repetir todos estos pasos las veces que quieras, no hay un límite cuando de placer se trata. Tómate tu tiempo y deja volar tu imaginación con tu pareja, la relación te lo agradecerá.
Los mejores aliados para disfrutar del Slow Sex
Para disfrutar del Slow Sex pueden emplearse diversos elementos que harán que la experiencia sea mucho más grata. Uno de los más recomendados son los aceites comestibles que harán que cada caricia cuente. Asimismo, hay estimulantes para el clítoris y la vulva que vienen en forma de gel y spray; sin olvidar los lubricantes que harán que el sexo anal sea más satisfactorio.
Qué evitar durante el Slow Sex
Para tener la mejor experiencia posible con el Slow Sex, hay que evitar en todo momento las prisas así como la eyaculación precoz. La idea es que cuerpo y mente estén conectados y enfocados en disfrutar del momento sin distracciones. No existen reglas para realizar esta práctica, así que tu pareja y tú pueden ser muy creativos; en pro de que la vida sexual sea la mejor.
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