Los huevos masturbadores masculinos son perfectos para iniciarse en la juguetería erótica y descubrir nuevas sensaciones.
Los huevos masturbadores masculinos son pequeños juguetes eróticos, perfectos para iniciarse en la juguetería.
Proporcionan nuevas sensaciones en la masturbación, haciendo que un gesto rutinario torne a algo totalmente diferente. Muy estimulante y al alcance de cualquiera.
Al tratarse de un juguete muy asequible, es uno de los básicos más vendidos, y también uno de los primeros productos eróticos que compran las personas con pene que desean experimentar nuevas sensaciones.
Como son discretos, pueden guardarse en cualquier sitio sin resultar muy evidentes. Gracias a su reducido coste, es sencillo poder probar diferentes texturas hasta encontrar la que más gusta.
Los huevos masturbadores están fabricados de un material muy flexible y con gran capacidad de adaptación, habitualmente TPE. Este material abraza el pene, adaptándose a cualquier tamaño, estimulándolo de una manera diferente.
En el interior de los huevos se presentan diferentes texturas que, a través de espirales, protuberancias, líneas u otros relieves, masajean el pene durante la masturbación.
Aunque a simple vista parezcan pequeños, pueden darse mucho de sí. Esto hace que puedan ser utilizados por cualquier persona con pene.
Una vez abierto, es recomendable lubricar o mojar (según el producto) para que deslice fácilmente. Con el pene introducido, se realiza la masturbación como más guste, y al finalizar se extrae el pene.
La mayoría de estos juguetes son de un solo uso, por lo que una vez se haya eyaculado, se desecha en el contendedor.
Algunos modelos, por sus especificaciones concretas, sólo necesitan ser mojados para que fluyan bien. En cambio, otros necesitarán la aplicación de lubricante.
De una u otra forma, necesitan esa ayuda húmeda para que el huevo deslice correctamente y pueda disfrutarse sin pellizcos o molestias; como pasaría si se hiciera en seco.
No. Las texturas están hechas del mismo material que el resto del huevo masturbador. Tienen un tacto suave y flexible.
Las protuberancias estimularán el pene, pero no lo dañarán durante el juego.
Aunque muchos de estos productos están indicados para un solo uso, es posible reutilizarlos un par de veces con la debida limpieza y un almacenamiento seguro.
No obstante, su material es delicado y puede alterarse con el uso, rompiéndose, por ejemplo. Es por ello que se recomienda seguir las instrucciones y desecharlo cuando la marca sugiere.
Los huevos masturbadores pueden usarse también para masajear la vulva. Esto puede hacerse dándole la vuelta dejando que la textura quede en el exterior.