Usar condón en las relaciones sexuales es un básico para evitar no solo embarazos no deseados, sino también infecciones de transmisión sexual. Por tanto, su uso no está en discusión, más bien al contrario.
Pero lo que quizás sí requiera cierta discusión o, cuanto menos, alguna explicación, es enseñarte los tipos de preservativos que te vas a encontrar en el mercado, para que tengas claro cuál debes elegir.
Factores para seleccionar el mejor condón
Al elegir un condón, hay varios factores a considerar para asegurarse de seleccionar el mejor condón para tus necesidades y preferencias personales. Aquí hay una lista de aspectos a tener en cuenta al elegir un condón:
Tamaño: Los condones vienen en diferentes tamaños, incluyendo regular, grande y extra grande. Es importante elegir un condón que se ajuste correctamente para garantizar la comodidad y la eficacia.
Material: Los condones están disponibles en diferentes materiales, como látex, poliuretano y polisopreno. El látex es el material más común y efectivo en la prevención de embarazos y enfermedades de transmisión sexual (ETS). Sin embargo, si eres alérgico al látex, puedes optar por condones de poliuretano o polisopreno.
Sensibilidad: Algunos condones están diseñados para aumentar la sensibilidad durante las relaciones sexuales, lo que puede brindar una experiencia más placentera. Estos condones suelen ser más delgados, pero, aun así, ofrecen una protección adecuada.
Lubricación: Los condones pueden venir lubricados o sin lubricación. La lubricación adicional puede mejorar la comodidad y reducir la fricción. Si prefieres utilizar tu propio lubricante, puedes optar por condones sin lubricación.
Textura: Algunos condones tienen texturas adicionales, como estrías, puntos o relieves, diseñados para aumentar la estimulación y el placer para ambos miembros de la pareja.
Reservorio: La mayoría de los condones tienen un extremo con un pequeño espacio llamado reservorio para recolectar el semen después de la eyaculación. Asegúrate de elegir un condón con un reservorio adecuado para evitar derrames.
Certificación: Busca condones que cumplan con las normas de calidad y seguridad establecidas por organismos de certificación reconocidos, como la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) en Estados Unidos o la marca CE en la Unión Europea.
Preferencias personales: Considera tus preferencias personales en términos de ajuste, sensación y características adicionales. Prueba diferentes marcas y tipos de condones para encontrar el que mejor se adapte a ti y a tu pareja.
Recuerda que es importante usar siempre condones para protegerte a ti mismo y a tu pareja de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. Además, sigue las instrucciones de uso del fabricante para garantizar una protección adecuada.
BENEFICIOS DE USAR PRESERVATIVO
Como te hemos dicho más arriba, el preservativo es un excepcional método anticonceptivo que se usa en las relaciones sexuales para evitar embarazados no deseados y la transmisión de ITS, infecciones de transmisión sexual.
De hecho, es el único método anticonceptivo que previene efectivamente del contagio de infecciones como el VIH, clamidia, sífilis o el virus del papiloma humano (VPH).
Usar condón en tus relaciones sexuales es lo más sencillo del mundo, porque no necesitas receta médica. Basta con ir a tu tienda erótica habitual para elegir el que mejor te vaya, y empezar a disfrutar del sexo con protección.
No vas a tener ningún tipo de efecto secundario al usarlo, de modo que esto no será excusa. En este caso, no estamos hablando de un tratamiento hormonal como otros anticonceptivos, por lo que no hay alteraciones posibles.
Y la variedad de condones que hay en el mercado es tan amplia que ya se han convertido, además de en nuestro principal aliado para un sexo seguro, en un juguete más; gracias a los sabores, texturas o efectos que incluyen muchos de ellos.
Preservativos femeninos
Tendemos a pensar que los preservativos son cosa de hombres, por aquello de que se colocan en el pene, pero también existen condones femeninos, que se colocan en el interior de la vagina, y protegen la vulva desde fuera. Su función consiste en disminuir el contacto genital y recoger la eyaculación, evitando embarazos no deseados, así como ITS.
Cuando pienses en preservativos, probablemente lo primero que se te ha venido a la cabeza es un pene con su “capuchón”. Estos son los preservativos más normales, los pensados para colocarlos sobre el miembro viril erecto antes de realizar el acto sexual.
Tipos de preservativos
Si buscas un preservativo normal, sin texturas, sin colores, sin sabores… siempre encontrarás en las estanterías los condones clásicos. Pero si quieres jugar un poco más en el sexo y probar cosas nuevas, sigue leyendo para conocer otros tipos de preservativos que vas a encontrar.
Sabores
Ideales para el sexo oral, pero también se pueden usar durante la penetración. Se recomienda cambiar el condón por uno nuevo tras el sexo oral; de esta manera evitamos arriesgarnos si, por un accidente, se ha dañado el condón con los dientes. Los preservativos de sabores han evolucionado muchísimo, desde sabores más tradicionales como el chocolate, la fresa o la vainilla, hasta algunos más sofisticados como la menta o hasta el champagne.
Retardantes
Los condones o preservativos retardantes nos ayudan a tener erecciones más prolongadas al estar cubiertos por un anestésico, la benzocaína. Este compuesto ayuda a retrasar la eyaculación al reducir la sensibilidad del pene.
Con efectos
Los preservativos con efectos suelen ser de dos tipos: de efecto frío, o de efecto calor. Además de las sensaciones que te produzca normalmente la penetración, en este caso sentirás frío o calor según hayas elegido.
Con textura
Los preservativos con textura añaden un toque de juego a las relaciones sexuales, permitiendo un toque extra de excitación. Esto es gracias a que no son preservativos lisos, sino que tiene texturas como estrías, puntos… que van a producir nuevas sensaciones durante la penetración.
Finos y extra finos
Son preservativos que tienen un grosor menor que los preservativos clásicos, de modo que las relaciones sexuales otorgan mayor placer. Eso sí, no se pierde nada de seguridad por el camino.
Sin látex
La mayoría de los preservativos están fabricados en látex, algo que debemos tener en cuenta si somos alérgicos a esa sustancia. Por suerte, ya hace tiempo que se venden condones sin látex para que todo el mundo pueda usarlos y disfrutarlos sin preocuparse de alergias.
Tallas de preservativos
Cada persona es un mundo, y al igual que las tallas definen la ropa que llevamos o los zapatos que calzamos, lo mismo ocurre con los preservativos: debemos prestar atención a su talla para asegurarnos que encaja bien en el tamaño de nuestro pene.
Usar un condón más grande del que nuestro pene necesita podrá hacer que se salga, y hacerlo con uno más pequeño nos producirá bastante dolor y presión, al tiempo que podremos romperlo.
Si no estás seguro de tu talla, deberás medir la circunferencia del pene desde la base de éste, es decir, la más pegada al pubis, y hacerlo cuando esté erecto, ya que lo usarás en ese estado.
Dicho esto, en el mercado encontrarás diferentes tallas de preservativos:
Talla S: Para penes entre 10 y 11 cm de circunferencia y un ancho de unos 49 mm.
Talla M: Circunferencia de 11 a 11,5 cm y ancho de 53 mm.
Talla L: Circunferencia de 11,5 a 12 cm y ancho de 57 mm.
Talla XL: Circunferencia de 12-14 cm y ancho de 60 mm.
Talla XXL: Circunferencia de más de 14 cm y ancho superior a los 64 mm.
Como ves, el mundo preservativo es bastante amplio y, por tanto, no está exento de que podamos cometer algún error en su compra o en su uso.
A la hora de comprarlo, el error más frecuente es equivocarnos con la talla. Sigue los consejos que te hemos dado para medir bien tu pene y así no tendrás más este problema.
Respecto al uso, uno de los principales errores que se suelen cometer es abrir el sobrecito que lo contiene con las uñas o los dientes y esto, queridos, puede romper el condón, perdiendo su finalidad protectora. Abre el sobre por las hendiduras que encontrarás en él.
A la hora de colocarlo, nunca debes hacerlo mientras el pene no esté en erección y, muy importante… ¡No debes desenrollarlo antes de ponerlo!
Por último, no retires el condón hasta que hayas eyaculado, o se haya terminado el juego erótico, ya sea que estés utilizando o no juguetes sexuales como vibradores, lubricantes o lencería, lo que suceda antes.
Recuerda que es importante mantener limpios tus juguetes sexuales para evitar que estos estén con semen y provoquen embarazos no deseados.
En BELOVER utilizamos cookies analíticas con tu consentimiento para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tu visita en este sitio web para medir las preferencias de nuestros visitantes. Para información adicional Pincha aquí.
Cookies estrictamente necesarias
En BELOVER utilizamos cookies analíticas con tu consentimiento para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tu visita en este sitio web para medir las preferencias de nuestros visitantes. Para información adicional o configurar tus preferencias Pincha aquí.
Si desactivas esta cookie no podremos guardar tus preferencias. Esto significa que cada vez que visites esta web tendrás que activar o desactivar las cookies de nuevo.
Cookies de terceros
Esta web utiliza Google Analytics para recopilar información anónima tal como el número de visitantes del sitio, o las páginas más populares.
Dejar esta cookie activa nos permite mejorar nuestra web.
¡Por favor, activa primero las cookies estrictamente necesarias para que podamos guardar tus preferencias!