Si cuando te dicen que hay que tener los pies en la tierra, piensas en hacerlo de pie, este es el artículo que estabas buscando. Porque hacerlo puede ser una experiencia maravillosa.
En seguida os contamos los trucos y las mejores posturas para tus relaciones sexuales sean mucho más excitantes.
Unos truquillos
Puede que alguna vez lo hayas intentado, pero no ha salido como esperabas. Con estos truquitos te podrás convertir en todo un experto en la materia.
Nadie dijo que fuera fácil, por eso es importante saber dónde nos vamos a apoyar para mantener la postura y el equilibrio. No todos somos funambulistas.
Una pared, una ducha estrecha, una mesa o la encimera de la cocina te servirán de punto de apoyo. Para las primeras veces, la persona que vaya a ser penetrada puede sentarse en una superficie más alta.
Y, como todo en esta vida, para poder aguantar la posición, el peso y el equilibrio, ponte en forma. Tener un abdomen y piernas fuertes te ayudarán muchísimo a la hora de intentarlo.
Posiciones para tener buen sexo de pie
Aprovecha la adrenalina que se desata cuando estamos teniendo sexo. Ese subidón de energía puede hacer que la experiencia sea muy placentera si además incluyes algunas de estas posturas para hacerlo de pie.
Contra la pared
Frente a frente, la persona que va a ser penetrada debe colgarse del cuerpo del otro. Coloca tus manos alrededor de su cuello y hombros, para sujetarte utiliza las piernas enrollándolas en su cintura. La persona que penetra debe sujetar fuerte a su pareja por las piernas y apoyarse en una pared si quiere mantener bien el equilibrio.
El movimiento de vaivén de la persona que está suspendida en los brazos de la otra permite que la penetración sea más profunda en esta postura.
El perrito a favor de él
Es una de las favoritas para la mayoría y una de las más excitantes.
Apenas requiere esfuerzo. La persona que penetra se coloca detrás y la que va a ser penetrada también de pie flexiona su torso, sin llegar a tocar el suelo con sus manos. Así, en lugar de estar en “cuatro patas”, está de pie y flexionada hacia adelante. Como cuando haces estiramientos, pero teniendo sexo.
Los pies en el suelo
Ambos de pie, completamente erguidos. La persona que penetra se pone detrás y los dos quedan con las manos libres para acariciarse mutuamente. La que está delante puede incluso girar su cabeza para besar a su amante.
Esta postura favorece un mayor control sobre la eyaculación.
La carretilla tailandesa
También conocida como el Pino Indio.
La persona que va a ser penetrada debe colocarse como en la posición de yoga llamada Sirsasana. Esto es, con las manos apoyadas en el suelo y las piernas sobre los hombros de su pareja sexual, que si es muy alta deberá flexionar sus piernas para que los genitales coincidan.
Requiere una buena dosis de equilibrio.
El equilibrista
Esta postura es algo más dificultosa.
La persona que penetra sostiene a la otra, que está de espaldas en forma perpendicular a su cuerpo. La que recibe apoya sólo una mano en el suelo para ayudar a mantener el equilibrio.
El visitante
Vamos con una un poco más sencilla, pero no por ello menos morbosa.
Frente a frente, las dos personas se acercan hasta que sus genitales se tocan. Igual tenéis que flexionar un poco las piernas hasta que las piezas encajen.
En esta postura la persona que ejerce la penetración debe sentarse y la que va a recibirla se coloca de pie y de espaldas para colocarse encima.
El ritmo y movimientos lo marca la persona que está arriba, por lo que es ideal para dominar y tomar el control de la situación.
La persona que está sentada tiene las manos libres por lo que puede tocar y jugar con el cuerpo de su pareja sexual.
Contra la pared, otra versión
En esta versión ambos suelen llegar al clímax rápidamente por lo excitante de la postura.
La persona que va a ser penetrada se coloca de cara a la pared, abriendo un poco las piernas, y la que penetra se acerca por detrás para tener sexo flexionando algo las rodillas.
Es una posición muy recurrente para un encuentro espontáneo. Llegas del trabajo y tu pareja está haciendo algo de pie, te acercas por detrás y…
El puente
Vamos con una variante del tradicional misionero.
La persona que va a ser penetrada se coloca en el suelo y apoyándose en sus pies eleva la cadera para que quede en alto, como si estuviera haciendo el puente. El que penetra se coloca delante con las rodillas un poco flexionadas.
Esta postura permite una perfecta penetración y puede generar estímulos muy intensos.
Y de paso tonificar glúteos. Una maravilla.
La vaquera
Esta es una de las posturas que debes probar al menos una vez en la vida.
Uno tumbado en el suelo boca arriba y la persona que va a ser penetrada se sienta encima tomando todo el control de la relación sexual.
Para aligerar el peso sobre la persona que está acostada, la que está encima puede inclinarse hacia atrás y apoyarse con sus manos, o hacia adelante colocándose en cuclillas.
Para las auténticas cowgirls y cowboys.
El ventilador
Con las rodillas apoyadas en el borde de una silla, piernas ligeramente abiertas, el cuerpo inclinado hacia delante y los brazos cruzados apoyados en el respaldo. La persona que penetra se coloca detrás para tener sexo.
Esta postura permite al que penetra utilizar las manos para acariciar el clítoris al tiempo que ejerce la penetración, o tocar el pene y testículos del otro a la vez.
La H
Una versión del misionero menos popular, pero infinitamente más excitante.
La persona que va a ser penetrada se tumba boca arriba con las piernas en alto y la que penetra se coloca delante flexionando las piernas para que los genitales coincidan.
Para ayudar a mantener la postura, el que está de pie puede sujetar con sus manos las piernas de la otra persona o dejar que las apoye en sus hombros. Así se forma la H.
La H especial
La H especial o minúscula es idéntica a la anterior, pero sólo levantando una pierna.
De esta manera, tanto la vagina como el ano se estrechan un poco, lo que puede contribuir a incrementar el placer de ambos.
La ducha: La superficie resbaladiza y el agua corriendo pueden crear una experiencia sensual y refrescante.
Contra una pared: Puedes utilizar una pared como soporte mientras te apoyas y encuentras un ángulo cómodo.
En la cocina: Utiliza una encimera o una mesa como punto de apoyo para disfrutar de la pasión mientras cocinas o te tomas un refrigerio.
En un vestuario: Si tienes acceso a un vestuario, puedes aprovechar los espacios privados para disfrutar de encuentros apasionados.
En una escalera: Encuentra una escalera con suficiente privacidad y usa los peldaños para apoyarte y explorar diferentes ángulos.
En una terraza o balcón: Si tienes privacidad en tu terraza o balcón, puedes disfrutar de la emoción de tener sexo de pie al aire libre.
En el baño público: Advertencia: ten en cuenta las leyes y regulaciones locales antes de considerar esta opción.
En el coche: Encuentra un lugar seguro y tranquilo para estacionar y disfrutar de la emoción de tener sexo de pie en el automóvil.
En la naturaleza: Si tienes acceso a un lugar remoto y privado al aire libre, puedes explorar la pasión en medio de la naturaleza.
En una sala de cine vacía: Si tienes la oportunidad de estar en una sala de cine vacía, podrías aprovechar el momento para disfrutar de encuentros íntimos.
Recuerda que es importante mantener la privacidad y respetar las leyes y reglamentaciones locales. Siempre asegúrate de que ambos estén cómodos y seguros al elegir cualquier lugar para tener sexo de pie.
En conclusión, las posturas para tener sexo de pie pueden ser una opción emocionante y estimulante para explorar en la intimidad. Estas posturas ofrecen una variedad de beneficios, como permitir una mayor conexión visual, estimulación del clítoris y una sensación de aventura y novedad.
Al elegir las mejores posturas para tener sexo de pie, es importante considerar la comodidad y la seguridad de ambos participantes. Además, puedes complementar estas posturas con otras técnicas y elementos que añadan aún más excitación a tus encuentros sexuales.
Si buscas durar más tiempo en el sexo, experimentar con posturas que permitan un mayor control del ritmo y la profundidad puede ser beneficioso. Además, no olvides que también puedes incorporar posturas para disfrutar el sexo oral y estimular el clítoris, ya que la estimulación de esta zona erógena puede intensificar el placer y llevar a orgasmos más satisfactorios.
Si deseas agregar un toque adicional de excitación y diversión, puedes explorar la posibilidad de visitar un sex shop. Allí encontrarás una amplia gama de juguetes eróticos, como vibradores, que pueden añadir una dimensión extra de placer y estimulación a tus encuentros sexuales.
Recuerda que la comunicación abierta y el consentimiento son fundamentales en cualquier experiencia sexual. Experimenta con las posturas, técnicas y juguetes que sean de tu agrado y el de tu pareja, y siempre respeta los límites y deseos de cada uno. ¡Diviértete explorando las mejores posturas para tener sexo de pie y disfruta de una vida sexual plena y satisfactoria!
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