Sabemos que existe el punto G en las personas con vagina pero, ¿te has preguntado alguna vez si tenemos otros puntos erógenos que nos puedan dar placer a través de las relaciones sexuales o con el contacto con juguetes eróticos?
La respuesta es ¡síiiiiiiii! Te queremos presentar el punto K. Si no sabes qué es, qué placer te puede ofrecer y cómo estimularlo, no dejes de leer, que te lo vamos a contar todo.
El punto G y el punto K son dos zonas erógenas importantes en la anatomía femenina. El punto G se encuentra en la pared frontal de la vagina, a unos 5-8 cm de profundidad, mientras que el punto K se halla cerca del cérvix. Para estimular ambos puntos de manera efectiva, un vibrador para el punto G puede ser de gran ayuda.
Además, con su forma curva y su punta bulbosa, este tipo de vibrador permite alcanzar y masajear tanto el punto G como el punto K, proporcionando sensaciones intensas y placenteras.
Qué es el punto K
El punto K parece otro gran desconocido en las personas con vagina. Y es que, si nos ha costado dilucidar qué era y dónde se encontraba el punto G, más nos cuesta encontrar el punto K, que fue descubierto hace 20 años por la sexóloga americana Barbara Keesling (de ahí su acrónimo como punto K).
Se trata de uno de los puntos de placer más intenso que podemos encontrar, y quien ha dado con él asegura que les ha otorgado los mejores y mayores orgasmos que jamás han experimentado.
¡Así que no podemos perder más tiempo!
Dónde se encuentra el punto K
Si queremos estimular nuestro punto K tenemos que saber su ubicación. Y el GPS no nos va a llevar a él, así que tocará explorar y que exploren nuestro cuerpo ¿no?
Se encuentra al final de la vagina, cerca del cuello del útero. Su posición complica el acceso hasta el punto K, y posiblemente sea difícil alcanzarlo con los dedos o con el pene, a no ser que su extensión sea bastante amplia.
La mejor manera de poder alcanzarlo es utilizar un juguete sexual, como el vibrador The Unicorn, y aún así puede ser complicado llegar al punto K porque puede estar tapado por el propio cérvix. Pero no dejemos de intentarlo.
Existen varias formas de llegar a este desconocido punto K.
Por un lado, podemos intentarlo a través de la excitación, aunque no sea un método tan efectivo como nos gustaría. Si excitamos la vagina, esta se dilata, el útero se eleva y muestra el punto K. Tesoro encontrado.
Por otro lado, y siendo la más efectiva, podemos intentar ejercitar el suelo pélvico. Cuando el suelo pélvico está tonificado (o tras trabajarlo), el útero tendrá una posición correcta y dejará al descubierto el Punto K.
Y para ejercitar el suelo pélvico, que podéis utilizar los ejercicios Kegel y las bolas chinas. Contar con un suelo pélvico en buen estado de salud te permitirá disfrutar de tus relaciones sexuales con mayor placer.
Cómo estimular el punto K
Como hemos comentado, no es tarea fácil encontrar, estimular y lograr el placer sexual a través del punto K, pero cuanto más nos cuesta, más valoramos el resultado.
Si quieres acertar para estimular tu punto K, con un juguete sexual es mucho más probable que lo logres, o con la excitación a través de la penetración. ¡Tú eliges!
Como no podía ser de otra manera, si queremos alcanzar el orgasmo a través de nuestro punto K hay posturas sexuales que nos pueden dar mejores resultados que otras.
La L
La persona penetrada se tumba boca arriba sobre una superficie plana, con los pies en alto. Mientras que la persona que penetra se coloca de pie frente a ella. La postura que alcanzan las piernas mejora la penetración.
El 5
La postura que hay que alcanzar es similar a la anterior, pero estando ambas personas sobre una superficie plana, a la misma altura. La persona que penetra se colocará de rodillas frente a la penetrada, que encogerá sus piernas, situándolas o apoyándolas a la altura de los hombros del otro.
Igualmente, permite que la penetración sea más intensa.
El perrito
Aunque sea de las posturas más utilizadas y conocidas del Kamasutra, cabe recordar que la persona penetrada se coloca a cuatro patas, mientras que la que penetra se pone a su espalda, arrodillada, sujetándola por las caderas.
Ayúdate de juguetes eróticos
Si todo lo que te hemos explicado y las posturas sexuales no os ayudan a encontrar el ansiado punto K, tenemos otro plan, los juguetes eróticos.
Sin duda, los que os pueden ayudar mucho a conseguir el orgasmo más placentero que hayáis experimentado son los dildos, o bien los vibradores, porque la estimulación puede alcanzarse con mayor efectividad.
Y la teoría está muy bien, pero la práctica…aún mejor. ¡Al lío!
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