No todos los penes son iguales. A lo largo de nuestra vida podemos mantener relaciones sexuales con personas muy distintas, y cada una de ellas tener un tipo de pene diferente. El grosor, la longitud o la propia epidermis del pene pueden tener características diferentes en cada hombre pero, ¿qué ocurre con los penes curvos? Quienes tienen un pene con esta forma, ¿tienen problemas a la hora de practicar sexo?
Según diferentes estudios, el tamaño medio del pene en todo el mundo es de 13,97 centímetros en erección, y algo más de 9 centímetros en reposo. Mientras el grosor puede expandirse de los poco más de 9 centímetros de diámetro, a los casi 12, en erección. América del Sur es la zona con una mayor media, con una medida de 16,15 cm, y Asia la que menos.
El tamaño del pene no tiene porque influir a la hora de mantener relaciones sexuales, y uno más grande que otro tampoco produce más placer. Hay una cuestión más importante: la forma. Por lo general, la forma de un pene tanto en reposo como en erección tiende a la recta; sin embargo, hay hombres con penes curvos. Un aspecto que puede llegar a condicionar la vida sexual, tanto la suya, como la de su pareja.
Qué es un pene curvo y cómo afecta a la vida sexual
Según las estadísticas, 7 de cada 100 hombres en el mundo tienen el pene curvo. Esto se da cuando el pene, a diferencia de la mayoría, no siguen una forma rectilínea, doblándose hacia un lado, hacia arriba o hacia abajo en el momento de la erección. En gran parte, esto se debe a que se forman unas estructuras fibrosas en su interior.
En el momento de la excitación, la sangre se expande a las diferentes cavidades del pene, provocando que éste se endurezca de forma rápida.
Sin embargo, en el caso de los penes curvos esta expansión sucede de forma bastante desigual por el tejido cicatricial, provocando una curvatura en el falo que puede llegar a afectar a la vida sexual.
De hecho, según estudio publicado en InfoSalud, el 40% de los hombres con pene curvo tienen problemas en la penetración. La curvatura del pene puede tener diferentes grados; si bien una ligera curvatura puede no ser molesta, una mayor acumulación de tejido fibroso puede causar diferentes molestias tanto físicas como psicológicas a la persona que lo sufre.
La formación de placas fibrosas en el interior del pene, así como su consiguiente curvatura, recibe el nombre de enfermedad de Peyronei; requiriendo en algunos casos tratamientos quirúrgicos o no quirúrgicos.
¿Cuándo es un problema?
Cabe la pena resaltar que no en todas las ocasiones tener un pene curvo puede resultar un problema. Se convierte en algo preocupante cuando existe dolor durante la erección, en la penetración, o al orinar, entre otros.
Incluso esa curvatura puede producir dolor a la otra persona, lo que puede llevar a la persona con el pene curvo a complejos e inseguridad tanto sexual como a la hora de conocer gente o hacer su vida diaria.
Sexualidad sin virilidad
La propia forma del pene curvo provoca que la sangre no llegue de una forma igual. Esto dificulta ya no solo la erección, si no la consecuente realización de la penetración y el poder tener una relación sexual satisfactoria.
Una situación que puede llevar al hombre a no disfrutar de una sexualidad plena y a no sentirse todo lo viril que quisiera en la cama. Sensaciones como de “no estar a la altura”, “¿por qué me pasa esto a mi?” y la lógica comparación con otros hombres puede provocarle desazón y desánimo.
Incomodidad
Tener un pene con esta curvatura puede provocar una incomodidad lógica a la hora de la penetración. Tanto para quien la padece como para la pareja, ya que el pene no entra de la misma manera que un pene recto, pudiendo tener incluso dificultades e incluso desistiendo en el intento.
¿Cómo tener sexo con un pene curvo?
Tener un pene curvo no tiene porque ser siempre sinónimo de dolor e incomodidad. Ni tampoco debe ser algo que determine el querer estar con una persona o no por el mero hecho de tener un pene curvo.
Es posible disfrutar al máximo del sexo conociendo diferentes posturas para penes curvos, que pueden provocar el mismo placer para ambas partes.
Pene curvo hacia arriba
El 5 o el balancín son las posturas con pene curvo hacia arriba más placenteras. En la primera, la persona que va a ser penetrada se estira colocándose sobre las piernas de la persona con pene. Esta postura permite tener una profundidad más intensa.
La postura del balancín es otra postura ideal para penes curvos hacia arriba. La persona receptora se coloca encima de la persona con pene y se inclina hacia atrás, pudiéndose mover hacia delante o hacia atrás para conseguir más placer.
Pene curvo hacia los lados
Las posturas más recomendadas al practicar sexo con una persona con pene curvo hacia los lados son la cuchara y el Tetris. En la primera, la persona con el pene curvo se coloca detrás, lo que le permite adaptar su falo a la dirección de la curva ya que ambos se encuentran en una postura ladeada en la cama.
Mientras que con la postura del Tetris, la persona que va a ser penetrada se coloca de lado y la persona activa puede adaptar la penetración sin problema teniendo incluso mayor capacidad de movimientos.
Pene curvo hacia abajo
El barco de vela o el perrito son las mejores posturas si la persona activa tiene el pene curvo. En la primera, la persona que va a ser penetrada se coloca encima de espaldas, mirando hacia a los pies.
Mientras que en el caso de la segunda, todo un clásico, la persona receptora se debe colocar a cuatro patas y el activo detrás teniendo con ello un mayor control en la penetración.
Otros consejos
El tener un pene curvo puede obligar tanto a la persona como a su pareja a llevar a cabo ciertas posturas como las anteriormente mencionadas para lograr sí una satisfacción más completa y menos dolorosa.
Es aconsejable utilizar preservativos texturizados ya que ayudan a maximizar la sensación de placer y conseguir de este modo experiencias mucho más satisfactorias y excitantes.
Sin embargo, no lo olvides, si notas dolor o molestias, o psicológicamente te condiciona el tener un pene curvo, acude a especialistas que te ayudarán a solucionar tu problema.
Si eres una persona curiosa y te gusta explorar tu sexualidad, una tienda erótica puede ser el lugar perfecto para ti.