En BELOVER utilizamos cookies analíticas con tu consentimiento para almacenar, acceder y procesar datos personales, como tu visita en este sitio web para medir las preferencias de nuestros visitantes. Para información adicional Pincha aquí.
El sexo forma parte de nuestra rutina básica y necesaria. El sexo, sí, es necesario. Y por ello conocerlo se ha hecho cada vez más importante. Cada vez es más frecuente la aparición de técnicas o disciplinas que ayudan a entender mejor nuestra sexualidad y, por tanto, disfrutar de un mejor sexo. ¿Sabías que la práctica de la meditación orgásmica puede ayudarte a conectar con el sexo de una forma más natural y disfrutarlo mucho más? Hoy queremos acercarte a la práctica de la meditación en el sexo.
La meditación orgásmica es una práctica que tiene como objetivo que disfrutemos de la estimulación sexual sin necesidad de alcanzar el orgasmo. Es algo similar al tantra pero en este caso nos referiremos a él como slow sex. El slow sex permite conectar más y mejor nuestra mente con las emociones.
La principal técnica de meditación orgásmica consiste en estimular un punto de placer durante unos minutos, pensando en ello disfrutando de las sensaciones que se te van a despertar. Todo, recuerda, lentamente. Estamos practicando meditación orgásmica, slow sex.
- ¡Oferta!
Shunga - Vela de Masaje Chocolate - 170 ml.
14,09€ Añadir al carrito- ¡Oferta!
Shunga - Vela de Masaje Fresas y Champán - 170 ml.
12,89€ Añadir al carrito- ¡Oferta!
Shunga - Vela de Masaje Frutas Exóticas - 170 ml.
10,21€ Añadir al carritoShunga - Vela de Masaje Mini Chocolate - 30 ml.
4,95€ Añadir al carrito
Meditar al menos una vez al día, aunque sólo sea unos minutos, ayuda a todo el mundo a controlar sus emociones. Trasladado al sexo, conectar con tu yo interno puede ser una verdadera viagra mental, que te ayudará a tener más ganas de sexo y mejorar su calidad e intensidad. Todo ello, además, gratis y sin efectos secundarios.
Por ello queremos ayudarte a conseguir una correcta meditación. Toma nota de estos consejos.
Para meditar debes hacerlo en un ambiente tranquilo, sin distracciones. Puede ser tu dormitorio, tu salón… da igual el lugar pero es importante que lo customices adecuadamente: baja luces, apaga todos los dispositivos electrónicos (¡Móvil fuera!) y mantén una temperatura que sea agradable: no debe ser ni muy fría ni muy calurosa, porque importa que estés perfectamente confortable durante el tiempo que dure la meditación. Será importante para tu comodidad dónde te sientes o apoyes, por lo que, si lo necesitas, no dudes en usar cojines o colchonetas.
La postura debe ser lo más cómoda posible, tanto para ti como para tu pareja si vais a practicar esta meditación juntos (algo muy conveniente). Elijas la postura que elijas, lo importante es que la columna esté recta y los brazos estén en los costados del cuerpo. Mantén tu barbilla levantada y la columna alineada con tu cabeza.
Concéntrate en tu espacio y en la respiración, es importante. Respira profundamente de forma relajada, sintiendo el aire que entra y el que sale. Cuando inhales, debes notar que el aire desciende hasta tu abdomen. Cuando exhales, piensa que tu estrés está siendo expulsado del cuerpo con el aire que sale.
Cerrar los ojos te ayudará a conectar con tus sensaciones. Ignora cualquier tipo de pensamiento que pueda desviar tu atención de la relajación buscada. Cualquier sensación que te llegue, debes entenderla pero dejarla marchar.
Es importante que conozcas tu cuerpo, que lo visualices bien y conectes con él, tanto con su aspecto físico como con su energía. El objetivo de la meditación sexual es que conozcas mejor tu cuerpo y aprendas a aumentar tu excitación sobre él.
Una vez que estás perfectamente conectado contigo mismo y con tu cuerpo, debes enfocarte en tu pareja. Piensa en su cuerpo, en sus emociones… intenta notar su respiración, observa sus movimientos corporales… y usa la comunicación no verbal para “hablar” con tu pareja: manos, cara, ojos… todo te ayudará a expresar lo que sientes sin hablar, a conectar.
Meditar para el sexo conlleva muchos beneficios más allá de llegar o no al orgasmo. Toma nota de algunos de ellos.
La meditación ayuda a conectar con tu pareja de un modo maravilloso.
El sexo puede encontrarse con dificultades por el camino: no controlar la eyaculación, la erección, no llegar al orgasmo… Con la meditación aprenderás a dejar a un lado la idea del sexo que tenemos preconcebida, alejando esa presión que a veces tenemos sobre lo que creemos que debe ser el sexo: erección, eyaculación, orgasmo… Cambiar el chip sobre lo que es y no es el sexo, y hacerlo con la meditación, te va a ayudar.
Ya has visto que controlar tu respiración es muy importante a la hora de meditar. Controlar esa respiración hará que aumente la oxigenación del cerebro, haciendo que el cuerpo active el sistema nervioso parasimpático y libere hormonas que nos darán felicidad.
Se acabó el “aquí te pillo, aquí te mato”, el sexo rápido para acabar lo antes posible. Gracias a la meditación sexual, afrontaremos el sexo relajados, llegando al orgasmo de forma tranquila y más placentera. No tendremos prisa de alcanzar el clímax porque estamos en un estado de relajación máxima. Sin prisa… el orgasmo llegará más tarde.
Tras todos estos consejos, ¿qué opinas? ¿Te animas a meditar con nosotros?
¿Te sientes aburrido en el dormitorio y buscas algo nuevo y emocionante? Nuestra sex shop tiene una amplia selección de productos que te ayudarán a despertar tu pasión. Desde juguetes hasta vibradores, ¡nuestra tienda tiene todo lo que necesitas para experimentar y disfrutar!